(29) Audio grabado el 26 de septiembre de 2016


Hola hijas mías.

Hoy es lunes, aunque ya son más de las doce de la noche, así que realmente es martes.

A raíz de la cena de la otra noche con vuestros amiguitos, vi que necesitabais estar en el pueblo, porque es donde sobre todo tú (la mayor), eres feliz. Ahí tienes a todos tus amigos, que son tus compañeros de clase en el colegio.

En el pueblo donde estamos, justo el de al lado, no tienes a ningún amigo. Y tampoco veo que hagas cosas por tenerlos. Tu vida está donde naciste. Tu vida está donde vas al colegio. Tu vida está donde yo también tenía la mía, hasta que me echaron como a un perro.

Hago el esfuerzo de ir todas las tardes, y que pases un rato en la alameda, o en el polideportivo, jugando con tus amigos.

Eso implica para mi un daño enorme. Ver las calles de la que un día fue mi vida. Ver las caras de la gente que, siendo testigos de la injusticia, nadie ha levantado la voz, y menos una mano, para decir ni siquiera que lo que me han hecho estaba mal...

Veo mi casa. La que era mi casa. El que era mi hogar. Me duele.

Vuestra madre piensa más en ella que en vosotras. Solamente pasa 1 día completo con vosotras de cada 15 días. Un domingo cada 15 días.

Y este último, prefirió irse a Madrid a una charla de motivación, bailes, y demás, con su entorno de trabajo, que estar con vosotras.

Por supuesto yo me quedé con vosotras, siendo que no me tocaba. Pero para mi es un regalo.

Vino a recogeros el domingo a las doce y media de la noche, teniendo el lunes colegio, guardería, y yo trabajo.

Lo que quiero decir es que ella hace las cosas pensando en ella, solamente. No mira a quién afecta. No piensa en qué perjudica o afecta a los demás. Se va, hace lo que quiere, y si os acostáis a la una de la madrugada habiendo colegio mañana, pues da igual.

Ella se aprovecha de que sois muy pequeñas. Se aprovecha de que todavía no tenéis conciencia ni madurez para juzgar sus actos. Y juega con la carta de la ventaja de que cuando crezcáis, no recordareis nada de todo lo que está haciendo.

Se aprovecha de esa ventaja. De que no juzgáis. De que no recordareis. De que sois muy pequeñas...



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Hoy le he dicho: "si esta tarde vas al gimnasio, yo me quedo con las niñas, cuando acabes pasas a por ellas".

Su contestación ha sido: "No. No te tocan las niñas. Prefiero dejárselas a mi hermana o a quien sea".

- ¿No será mejor que estén con su padre?

- No.


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Ella no necesita nada de vosotras. Solo saber que estáis bien. Nada más. Ni tiempo con vostras, ni muestras de afecto, ni juegos, ni colaboración en las tareas escolares...

Nada.


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Hoy se ha ido a la revisión con el cirujano que le ha operado del aumento de pecho. No quiero ni pensarlo, después de lo que vi, y de lo que hablaban entre ellos...

Son las ocho de la tarde. La hora en la que os dejo con vuestra madre para que durmáis con ella, ya que yo madrugo muchísimo, y acordamos que dormiríais con ella.

Pasa una hora.... No viene.

Anochece.... No viene.

Sale la vecina de la puerta de al lado, ya sabéis... la madre de vuestros dos vecinitos. Me pregunta si necesito algo, si quiero pasar a su casa. Le agradezco el gesto con cara desencajada, y avergonzado, y sigo esperando, con vosotras, en la puerta. En la calle.

Le llamo. Me dice que ahora viene.

Aparece veinte minutos más tarde, vestida de una manera que no es la normal para un día entre semana, oliendo excesivamente a perfume, con tacones altos...

Es obvio que venía de una cita. Seguramente de una cita con algún hombre salido de esas aplicaciones para encontrar pareja (encontrar sexo, más bien).

Qué dolor. Cómo duele verle. Cómo duele saber lo que hace.

Ésta, era la tarde de martes que tenía libre. La tarde que sería la ideal para estar con vosotras. Para aprovechar y hacer algo juntas, con vuestra madre...

Ella ha preferido tener una cita.


Cada vez que os dejo delante de la puerta blanca, y la puerta se cierra, me derrumbo. Era mi casa. Era mi hogar.

Y la puerta se cierra. Y dentro está mi familia. Y dentro estáis vosotras. Y dentro estaba mi vida... Y no puedo entrar.

Tengo que coger el coche, y conducir hacia cuatro paredes vacías y silenciosas.

Mi mente lo entiende. Entiende lo que pasa. Pero no lo acepta, no lo asimila, no lo asume. Intenta pensar que algo se puede hacer, que todavía me queda algo de energía para luchar por lo que es mío, que algo se podrá hacer, decir, mover, inventar, pensar, gestionar, hablar, para recuperar lo que me han quitado...

Pero ya nada es mío. Me lo han robado todo. Y no se puede hacer nada.


Imagino lo que estaréis cenando... Cómo os ponéis el pijama, y os vais a la cama.

La tristeza. La rabia. La injusticia. La angustia. Todo se apodera de ti.

Todo empieza a dar vueltas en tu cabeza.

Solo puedes encender un cigarro tras otro para ni siquiera calmar nada.

Boca del estómago cerrada y encogida, apenas deja pasar dos rebanadas de pan con medio tomate y un poco de ajo.

Medio Diazepam hará el resto.

Otro día más.



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No puedo seguir así.

Esto me está destrozando.

Cada vez el sentimiento de supervivencia me lleva más hacia la decisión de volverme con mi madre y abuela. A Valencia.

Aquí me estoy hundiendo en un pozo negro y horrible.

Quiero vivir. Por favor.

No quiero morir.



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Ella insiste en que la culpa es mía, que yo le quería "absorber demasiado".

¿Absorber?

Pero si ella nunca estaba en casa. ¡¡NUNCA!!

Os he criado yo, a las dos.

Cómo explicarlo...

¿Qué pasa? ¿Que como yo no tengo tetas grandes y labios rojos, nadie me cree?

¿Nadie me cree?

Me estoy volviendo loco.


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En la última etapa de la relación, todo eran salidas. Salidas con amigas, familia, entorno de trabajo... Salidas nocturnas. Discoteca. Alcohol...

¿Absorber?

¿Absorber?

Con dos hijas pequeñas, una de ellas bebé.

¿Absorber?


Lo que necesitaba era un poco de su presencia. Un poco de su ayuda. Un poco de su apoyo. Un poco de su reconocimiento.

Un poco de pareja, de mujer, de madre, de amante y de amiga.


Solamente un poquito hubiera bastado. La intención, solamente.


Yo siempre solo, con toda la carga, y ver cómo se escurría entre mis dedos...


No puedo más.


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