(131) El vecino


Hola chicas. 

Vivimos justo encima de un vecino un tanto peculiar.

Cuando nos lo cruzamos en la calle, se comporta. Pero cuando está en su casa, pone la música o la televisión a un volumen muy alto, incluso hasta altas horas de la noche, y muchas veces se pone a gritar cosas sin sentido, o insultos, desde el balcón. 

Yo os distraigo para que no le escuchéis. 

Drogadicto, alcohólico y exconvicto... Aquí en el pueblo sus "historias" son bien conocidas.

Tengo ganas de que me digan si puedo acceder a comprar la casa que he visto. 

Así nos mudaríamos y ya no viviríamos encima de este vecino.

Otra mudanza más, y ya irán 6.

¿Por qué tengo yo que pasar por esto?

Yo tenía ya mi casa comprada. Una casa preciosa. Mi hogar. 

He tenido que pasar 5 mudanzas, he dormido en un sofá y en el suelo.

Qué injusticia lo que me hicieron.

Solo me queda seguir luchando, pasa intentar daros el mejor futuro posible. 

Vuestra madre ahora está que no para por casa. 

Siempre diciéndome que se va a hacer senderismo (todo parece indicar que ahora estará liada con alguno que hace de guía para caminar por la montaña), y siempre diciéndome que se va a tomar algo o cenar con amigas de Valencia.

Hoy mismo le he dicho que si dormíais con ella porque mañana entro pronto a trabajar, y me ha dicho que sale por la noche, que llegará tarde, y que no os lleve con ella tampoco mañana temprano. Que os lleve directamente con la niñera.

Y estamos hablando de que es jueves. 

Prefiero no pensar nada sobre la vida que lleva. No me tiene que importar. 

Solo me importa que vosotras esteis bien y que no madruguéis mucho, como consecuencia de los turnos de mi nuevo trabajo. 

Ya me apañaré yo para teneros.

Pero no dejo de darle vueltas a por qué estoy teniendo que pasar yo estas situaciones, cuando yo ya tenía mi casa. La que compré con ella. 

¿Por qué...? 

Os quiere,
Papa. 
Un beso muy fuerte para las dos. 



Comentarios