(177) No entiendo...
No entiendo cómo alguien es capaz de echar de su propia casa, al padre de sus hijas.
No entiendo cómo se puede tener la sangre fría y el egoísmo de lanzarle al vacío... Al padre de tus hijas, a tu pareja.
Mi casa... Mi hogar... No se me olvida. La compramos y arreglamos con muchos euros, amor y ganas.
Cómo es posible que te puedan echar como a un perro... Era mi hogar. La casa familiar. Os crié en esa casa...
Y ahora, después de pasar muchísimos por ella, hay otro más metido dentro... Viviendo.
No entiendo, hijas mías, cómo no decís nada.
Se que sois pequeñas (11 y 6 años), pero sabéis que tiraron a vuestro padre de casa, separandolo de vosotras, y ahora este será el segundo que tengáis que aguantar metido en casa...
No entiendo cómo no os revelais, y decís que está mal lo que hace. Que eso no se le hace a ninguna persona, pero mucho menos a un padre.
No lo entiendo... Le dais todo por bueno...
A veces, estos pensamientos me atormentan... Me siento muy solo con ellos.
No se los puedo contar a nadie.
Y nadie quiere escucharlos.
No queda más, que seguir.
Seguir con el alma rota.
Sin ganas.
Pero seguir.
Comentarios
Publicar un comentario