(193) Mi pequeña malita y yo sin poder hacer nada

Hoy lunes, el día que os vais. 

Hoy justo mi pequeña se pone enferma del estómago, probablemente un virus estomacal.

Tienes un dolor muy grande en el estómago. Vomitas todo lo que tomas.

Hemos pasado la tarde abrazados en el sofá, pero ha llegado tu madre y pedía que bajaras y que os fueseis con ella.

Tu hermana mayor tiene mañana un examen complicado de sociales, de esos de estudiar un tema largo: La Prehistoria.

Le digo a vuestra madre si puede quedarse la pequeña un rato conmigo, hasta que se encuentre un poco mejor, y luego yo le acerco a su casa.... Pero se niega. 

Empieza a decir que es su semana, que le toca a ella, e insiste en llevársela.

Yo solo quería darte cuidados, consuelo, y un rato de tranquilidad hasta que estuvieras mejor.

Insiste en llevarte. Mal. Con dolor de estómago muy grande.

Yo impotente. Lleno de rabia, por querer hacer y no poder. 

Te arrancan de mis manos. 

Tu hermana mayor, como siempre, acatando las órdenes de vuestra madre. Que bajase a la niña... 

Me quedo desgarrado de dolor. Quiero cuidarte. Quiero estar contigo. Quiero darte consuelo, tranquilidad, cuidado, apoyo. Quiero saber de ti y estar contigo...

Y te arrancan de mis manos. Dejándome lleno de dolor y de rabia. 

Impotente.

Me quiero obligar a no pensar. Me quiero obligar a pensar que no puedo hacer nada. Que así está estipulado por obligación. Pero no puedo dejar de pensar que estas mala y te duele muchísimo el estómago, y que tu hermana mayor está preocupada por el examen de mañana.

Y así, os vais. 

Y así, me quedo.

Es injusto. Tremendamente injusto.

Quiero cuidaros y ayudaros. Y no puedo. 

No quiero rogar. No quiero tener que ir preguntando y detrás de todo el mundo, para saber de vosotras.

Quiero ESTAR con vosotras.

Y te tienes que aguantar el dolor. Tienes que tragarte la rabia y dejaros marchar.

Doy un puñetazo a la puerta de la rabia y la impotencia... 

¿Qué hago? ¿Preguntar y ya está? ¿Preguntar a vuestra madre? ¿A la niñera? ¿A mi hija mayor?

¿Qué hago? 

Estoy cansado de sufrir tanto.

Estoy harto de llevar tanto dolor dentro. 

Me quedo desgarrado por la injustícia y el dolor. 

Pienso que no preguntaré ni diré nada durante la semana, porque si no, no podré frenar el impulso y el deseo de estar con vosotras.

Y sé que lo pasaré mal. Porque no podré estar con vosotras. Dirán que no me toca.

Y tendré que hacer como que no me toca, cuando mi deseo es estar con vosotras siempre, y más en momentos como estos. En días difíciles como este.

Me quedo mudo. Mudo. 

No puedo hacer nada.

Tengo un nudo en el estómago. 

Los nervios no me permiten comer ni beber. 

Enciendo un cigarro. Luego me dicen que no fume... 

Olbigarme a pensar en no pensar. A callar, a estrangular y matar mi deseo de estar con vosotras y cuidaros.

Es una tortura horrible que no puedo describir con palabras.

Luego, dicen que hablo poco. Que soy serio...

Lo que llevo dentro es horrible. 

Un padre mutilado. 

Un amor mutilado. 

Y no poder hacer nada. 

El corazón y el estómago encogidos.

Sin ganas de nada. 

Obligarse a no pensar, a no sufrir. 

......................... 

Pienso en callar. 

En callar para siempre. 

En dejar de sufrir. 

Pienso en tener con vosotras la relación justa y necesaria para alimentaros y poco más que lo justo. 

Pienso en maneras de evitar este dolor. 

Y no las encuentro. 

¿Qué hago? 

Ahora mismo, estoy sentado en el sofá impotente, cuando lo que quisiera es estar con vosotras, poner solución a vuestros malestares y preocupaciones. 

Y un puto muro de mierda, impuesto por una puta egoísta de mierda, me lo impide.

¿Cómo salir de este dolor, y sonreír? 

Se te queda la cara de piedra. El corazón ahogado.

Luego, no preguntéis que por qué tengo esa cara... 

Todo está dentro. 

Mejor no preguntéis. Sed felices. 

..............................

Pienso en dejar de escribir estas cartas. 

No quiero que esto sea un pozo de dolor y tristeza. 

Yo, dentro de mi también tengo a una persona positiva, amable, divertida, y llena de cariño. 

Pero todo eso está tapado por mil capas de sufrimiento y dolor. 

Todo causado por el desastre que hizo ella. 

Pienso en dejar de escribiros. 

No quiero revolcarme en este sufrimiento. 

No sé si seguiré escribiendo. 

Solo quiero descansar en paz y dejar de sufrir. 

.................................. 

¿Y mañana? ¿Estarás bien? ¿Irás al colegio? ¿Hará falta llevarte al médico? ¿Y el examen de tu hermana mayor? 

¿Qué hago? ¿Preguntar y sufrir? ¿No preguntar y sufrir? 

..................................... 

No existe castigo sufienciente para el dolor causado a mi y a vosotras. 

No lo hay. 

Callo. Bajo la cabeza. Y cierro los ojos. 

Estoy cansado de sufrir. 




Comentarios