Cartas para mis hijas

No sé que ha pasado este año 2023, pero en la primera mitad del año, han surgido varias oportunidades de empezar una relación con alguien... He conocido a chicas, a otras ya las conocía... Pero todo sin buscarlo. Con el poco tiempo que me queda, no puedo ni quiero dedicarme a ello.  El caso es que no puedo. No le veo sentido. Ninguna de ellas es vuestra madre. Y ya tienes que desdoblarte en dos personas. Por una parte, el padre. Y por otra parte, el hombre-pareja-novio.  Llevar dos vidas, dos cabezas, dos maneras de pensar...  No me gusta.  Con ninguna de ellas podría compartir vuestros pequeños o grandes logros del día a día. Ellas no son vuestra madre.  Por otra parte, tantos años sólo, sin que nadie estuviese a mi lado, han hecho que a la fuerza me haya convertido en una persona independiente, dueña de su tiempo.  Cuando lo necesité, nadie estuvo. Y así, solo, me tuve que enfrentar a todo.  Me di cuenta que soy capaz de todo. Y mucho más que hay den...

Era una tarde de febrero... En aquella época, yo vivía en Valencia, y solía salir a correr por el cauce del río, para hacer deporte. Corría unos 20 - 25 minutos, y luego subía varias veces las escaleras y hacía unas flexiones. Ese sábado, acabé de hacer deporte sintiéndome muy bien. Estaba feliz. Me sentía bien después de la sesión de correr y flexiones. Pensé, que me apetecía salir, escuchar música, divertirme un rato... Pero no tenía con quién. No recuerdo por qué, ese día no tenía a nadie disponible para salir. Así que, como me encontraba tan bien, tan fuerte, decidí que no pasaba nada por salir solo. Quería escuchar música y distraerme un rato. Me lo había ganado. ------------------------------------ En aquellos momentos, estaba de moda una discoteca que se llamaba "Treintaytantos". Por el nombre, ya podéis deducir que era un local destinado a gente ya un poco más mayor, y la música estaba muy bien, para aquella época. El local yo ya lo conocía. Está en la calle Eduardo B...

¡Hola chicas!  Otro curso que acaba... y otro verano que comienza. El curso ha salido genial. Mi chica mayor, como siempre, notas finales de Sobresaliente y Notable. Ya pasas a 3º de ESO. Mi chica pequeña, aunque ha tenido un curso un poco movido (primero un maestro sustituto, luego un sustituto para el sustituto), con notas finales de Sobresaliente y Notable también. Ya pasas a 4º de Primaria. Estoy muy muy contento y orgulloso de vosotras. Ya sabéis que lo nuestro nos ha costado... Recuerdo los exámenes de historia, el álgebra y las ecuaciones... también las tablas de multiplicar y las divisiones... Pero ya está. Lo hemos vuelto a conseguir. Ahora, a disfrutar del verano. Campamento... Piscina del pueblo.... y como ya sabéis, algo de deberes haremos durante el verano. Os he comprado unos libros (los que habéis elegido vosotras) para que leáis un rato cada mañana, y en el caso de mi pequeña, que necesita reforzar y asentar todo lo dado este año, unos cuadernos de operaciones matem...

A veces, me viene el pensamiento de si he hecho lo correcto quedándome en este pueblo, solo, y perder los mejores años de mi vida. Pero entonces, pienso en cuál hubiera sido la alternativa... Haberme ido, vivir la vida, tener más amistades, y muy probablemente, acabar esforzándome por hacer feliz a otra mujer, y a sus posibles hijos.  Pienso en todo lo que hemos conseguido, en quiénes sois vosotras, y todo lo que hemos pasado y peleado juntos.  Pienso en que cada año que pasa, os convertís en unas chicas estupendas, inteligentes, y felices.  Y entonces, llego a la conclusión de que hice y estoy haciendo lo correcto. El precio es muy alto. Pero tengo la absoluta seguridad, de que ha merecido y merecerá la pena. Lo volvería a hacer una y mil veces más, por vosotras.  Os quiere,  Papá.