(274) Oferta rechazada
Hola chicas.
Actualmente, estoy trabajando de vendedor, para una empresa que se dedica sobre todo al sector educativo (colegios, institutos, academias de estudios,...).
No estoy muy a gusto, porque la verdad, mi jefa y la jefa de mi jefa son bastante, por decirlo suavemente, estúpidas... pero por otra parte, el horario me permite atenderos, ayudaros, y despertar a mi chica mayor para ir al instituto, y acompañar al cole a mi chica pequeña.
Me puse a mirar otras ofertas, y encontré una, que pagaban muy bien ( 29.000€ anuales), daban coche de empresa, y los viernes se acababa a mediodía.
El problema era, que el puesto exigía viajar, una semana si y una semana no, a Alicante y Murcia, durmiendo fuera. Tres o cuatro noches durmiendo fuera, en un hotel, cada dos semanas, o quizás más.
Pues bien, el caso, es que fui seleccionado para esa oferta.
Sí, me cogieron a mi.
Un sueldazo, coche de empresa, y un buen sitio para trabajar.
Pero... rechacé el puesto.
¿Por qué?
Pues porque no podría llevaros al colegio o al instituto nunca (se entraba a las 8:00, con lo que tendría que salir de casa a las 7:00), y muchas tardes y noches no estaría en casa, para atenderos a vosotras.
Yo sé que cuando seáis mayores, me diréis que tendría que haber cogido ese trabajo. Que nos hubiéramos apañado como fuese... que tenía que pensar en mi....
Si... Pero eso lo diréis cuando ya seáis mayores, y ya esté todo el "trabajo hecho". Cuando siempre haya estado ahí para vosotras. Para explicaros, para ayudaros, para sacaros a jugar a la calle, para pagar vuestras excursiones, para resolver vuestras dudas y daros mi ayuda con vuestros problemas...
Seréis mayores, y me diréis que tendría que haber cogido ese trabajo...
Pero no pensaréis, cómo llegasteis a ser las personas que sois, quién os llevó hasta ahí de la mano, acompañando cada pequeña decisión, cada pequeño gran reto, solventando cada duda, y dando esa presencia que tanto necesitáis.
Tomé la decisión.
No quiero estar lejos de vosotras.
Quiero que os sintáis queridas, acompañadas, y valoradas.
Quizás me haya equivocado... o quizás no. Nunca lo sabré.
Pero si volviese a pasar todo lo que he pasado, volvería a tomar las mismas decisiones.
Os quiere,
Papá.
Comentarios
Publicar un comentario